Es aquello que surge con nobleza
aún cuando el dolor nos crucifica,
lo que invita al hacer que no claudica
y nos muestra del alma su grandeza.
Anhelo de pasión y fortaleza
impetra vehemencia y sacrifica,
la entrega siempre fiel que multiplica
la franca voluntad de la firmeza.
Sublime es ese amor que no traiciona,
que vive su verdad mientras admira
la osada voluntad que no abandona.
Sapiente siempre enfrenta la mentira,
supremo en su bondad también perdona
y libre en su albedrío nos inspira.
Aimee Granado Oreña ©
Gota de Rocío Azul