Ilusos manifiestan sus honores
sin manchas de arrogancia ni entresijos,
revelan los soñados acertijos
que inspiran rosicleres seductores.
Y saben discernir entre clamores
espectros de visiones y amasijos,
trinares sin censuras ni atadijos
que entonan sus romances delatores.
No hay dudas que en el canto milagroso
florece la virtud cual sortilegio
que ofrece su caudal maravilloso.
Se escucha en el azar un florilegio
que surte en su concierto prodigioso
el místico arrebato de su arpegio.
Aimée Granado Oreña©
Gota de Rocío Azul